México… ¿No te das cuenta hacia dónde te están llevando?
Esther Quintana.- La personalidad de José Stalin, el dictador ruso, no era nada edificante: egocéntrico, ambicioso y cínico. De su corte de seguidores exigía fidelidad al 100 por ciento y también hacerse, como decimos coloquialmente en México, ciegos a conveniencia. Ejercía fascinación sobre ellos con