Gobierno federal hace uso de recursos públicos a discreción para financiar al régimen de Cuba: Alejandra Reynoso
Ciudad de México 14 de junio de 2020.- En conferencia de prensa virtual, la senadora por Guanajuato, Alejandra Reynoso Sánchez, solicitó al Gobierno federal rendir cuentas de la labor que realizan los médicos cubanos en el sistema de salud de México.
“Con tanta dispersión de información y la discrecionalidad con la que el Gobierno federal hace uso de los recursos públicos, le pedimos y le exigimos que pueda aclarar cuántos médicos y de qué especialidades han ingresado al país, incluyendo al personal de enfermería; bajo qué régimen fueron contratados y cuál es su estatus migratorio, dado que para Cuba se ocupa una visa mexicana”, aseveró la legisladora guanajuatense.
Es importante, agregó, que el gobierno de México hable con la verdad, o de lo contrario se pensará que el objetivo de la llegada de estos médicos es la implementación de más médicos en México para el financiamiento del régimen comunista de Cuba desde nuestro país.
Reynoso Sánchez recordó que el 6 de abril de 2020 se anunció que llegaban 10 médicos para atender la pandemia de Covid-19, sin embargo, el Canciller declaró que no prestarán servicios médicos a la población y únicamente harían recomendaciones de política pública. El 24 de abril aterrizó un avión de la Fuerza Aérea Mexicana de la CDMX con 145 médicos de Cuba.
“Ya había médicos cubanos en nuestro país, porque ya habían arribado cuando ni siquiera la ley permitía que médicos extranjeros pudieran prestar servicio en nuestro país, y cuál es la solución de este gobierno, el decretar. Entonces el 24 de abril emiten un decreto para poder salvar lo que ya habían hecho”, aseveró la “Wera” Reynoso.
El 13 de mayo se anuncia la llegada de 590 médicos, que fueron hospedados y recibieron apoyos con recursos provenientes de la Secretaría de Turismo de la Ciudad de México. En total las autoridades de esta entidad tienen el recuento de 800 médicos cubanos. Aunado a ello, casi 200 médicos fueron enviados a Veracruz a prestar servicios a través del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi).
Por lo anterior, indicó que, por medio del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (Inai) seguirá insistiendo para obtener los datos que solicitó a través de un punto de acuerdo presentado ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, donde exhorta a la Secretaría de Salud a que se informe cuántos médicos extranjeros colaboran a través del Insabi y en qué entidades federativas, así como el costo que representa para el Estado mexicano.
Además, Reynoso Sánchez exhortó a la Secretaría de Gobernación para que a través del Instituto Nacional de Migración informe cuántos médicos o profesionales de la salud extranjeros han ingresado al país, así como a la Secretaría de Relaciones Exteriores para que dé a conocer si existe algún acuerdo, convenio o instrumento internacional con Cuba en materia de salud, ciencia o educación, y al Instituto Mexicano del Seguro Social a que transparente el o los Convenios de Cooperación Técnica en Investigación y Educación que tenga con otros países.
De acuerdo con un medio de comunicación cubano, se tiene un contrato de 6.2 millones de dólares (140 millones de pesos), y por cada médico de ese país el gobierno mexicano ha pagado 10 mil dólares mensuales. En este sentido, médicos cubanos señalaron al Diario de Cuba que han recibido 660 dólares para tres meses para destinarlo a comidas, indicó.
Asociaciones y organismos cubanos han calificado la diplomacia de Cuba como un mecanismo de esclavitud; tráfico de personas. El gobierno cubano financia su régimen explotando a los trabajadores de la salud, considerando que el salario promedio de un médico general de Cuba es de 875 pesos, ya que cuando son enviados a una misión solo reciben entre el 10 y 20 por ciento, lamentó.
A pregunta expresa de los medios de comunicación sobre la llegada de los 10 médicos procedentes de Alemania, la senadora panista precisó que el Canciller dio a conocer que es un convenio con la Unión Europea, donde el Estado mexicano no eroga los salarios, a diferencia de lo que sucede con los médicos cubanos.