Palacio Legislativo de San Lázaro, a 18 de noviembre de 2021.- El cáncer es la tercera causa de muerte en México, cada año se detectan un aproximado de 190,000 casos nuevos de cáncer y mueren cerca de 83,000 personas por este grupo de enfermedades.

Además, el cáncer tiene un impacto social y económico enorme en el país, puesto que genera altos gastos de bolsillo para las familias y en muchas ocasiones las conduce a la ruina económica.

70% de los casos de cáncer se diagnóstica en etapas avanzadas, lo que impide la recuperación de los pacientes y genera altas tasas de letalidad, no obstante, México cuenta con instrumentos para evitar desenlaces fatales, puesto que la detección temprana del cáncer puede aumentar en un aproximado de 50-60% las posibilidades de supervivencia.

Para poder identificar de mejor forma las necesidades de su atención, el día 22 de junio de 2017 se reformó la Ley General de Salud para crear el Registro Nacional de Cáncer, con los siguientes objetivos:

Crear una red de registros
Orientar políticas públicas en prevención, detección temprana y tratamiento.
Contribuir en la planificación de servicios, infraestructura y adquisiciones.
Analizar la capacidad hospitalaria instalada.
Planear y garantizar la suficiencia de recursos humanos.
Planear y asignar recursos financieros.

Lamentablemente con el gobierno de Morena se acentuó la desigualdad en el acceso a los servicios de salud para atender el cáncer, principalmente para las niñas y niños. En ese contexto, debido a recortes presupuestales, el Registro Nacional de Cáncer dejó de operar a partir de enero de 2021 y para marzo pausó sus actividades en su totalidad.

En el Presupuesto de Egresos de la Federación para el año 2019, producto de una solicitud de ampliación presupuestal que presentamos en la Comisión de Salud, se otorgaron al Instituto Nacional de Cancerología (INCAN) $35,000,000 de pesos adicionales para el Registro Nacional de Cáncer, mismos que originalmente no estaban considerados en el proyecto de presupuesto enviado por el Ejecutivo Federal a la Cámara de Diputados[1]. Pero ahora se abandonó esta responsabilidad presupuestal.

Ahora, en el Presupuesto de Egresos de 2022, aprobado por Morena y sus aliados en la Cámara de Diputados, no se identifican conceptos de gasto destinados al Registro Nacional de Cáncer; además, el Partido del Presidente evadió las propuestas de ampliación presupuestal que se presentaron para este fin.

El Registro Nacional de Cáncer actualmente debería estar en etapa de consolidación, sin embargo, ya lo quieren sepultar para ocultar datos y evadir la responsabilidad de brindar atención a los enfermos. A pesar de que miles de vidas de niñas y niños se podrían salvar con este registro oportuno, para brindar atención especializada de inmediato.

El Registro Nacional de Cáncer es una obligación legal que tiene la Secretaría de Salud establecida en la Ley General de Salud, además de que cuenta con el respaldo y colaboración de instituciones nacionales e internacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS), la American Cáncer Society y la Unión Internacional Contra el Cáncer.

Conocer la información relacionada con este padecimiento permitiría que en el futuro podamos controlar mejor el cáncer, lo que no implica su erradicación, pero sí una disminución de los casos identificados de forma tardía y una mayor tasa de curación de los cánceres diagnosticados y tratados.

Por lo anterior, los diputados del PAN seguiremos insitiendo en la implementación del Registro Nacional de Cáncer y el abasto de medicamentos oncológicos. ¡Basta de sufrimiento! ¡Basta de desabasto!