Ciudad de México 2 de diciembre de 2021.-Durante el séptimo encuentro del Grupo de Puebla en nuestro país, que se llevó a cabo del 29 de noviembre al 1º de diciembre, se reunieron los líderes políticos de la región y de España de corte izquierdista. México se convierte una vez más en la sede de un foro que alberga dictaduras como la de Cuba, Nicaragua y Venezuela.

La reunión del Grupo de Puebla en México es una muestra más del corte autoritario de este gobierno que nuevamente abre la puerta a socios de su mal llamado “progresismo” que han dejado a sus países en las peores condiciones, afirmó Mariana Gómez del Campo, Diputada Federal.

En el evento participaron, entre muchos otros, el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero de España, quien dejó a su país con la tasa más alta de desempleo, los brasileños Lula Da Silva y Dilma Rousseff, ambos representando uno de los peores casos de corrupción en Brasil; Rafael Correa de Ecuador, condenado a 8 años de prisión por el “Caso Sobornos” y Evo Morales de Bolivia que estuvo 13 años en el poder.

“La presencia del Grupo Puebla en la Ciudad de México, anunciada con tanto entusiasmo por el Canciller demuestra de cuerpo completo cual es la esencia del movimiento morenista, una ideología que lleva a las personas que gobiernan a la pobreza total, a la falta de democracia y al enriquecimiento de los que se encuentran en el poder”, aseguro la también Secretaria de Asuntos Internacionales del CEN del PAN.

Es reprochable que el Grupo de Puebla esté presente en territorio nacional, que estén encontrando en nuestra tierra suelo fértil para implantar ideas fracasadas, obsoletas y mandar señales de apoyo a otros líderes del mismo corte ideológico.

Tiene que quedar claro que este mal llamado progresismo no es más que una organización opuesta a la democracia, diseñado para eliminar las libertades de los ciudadanos que buscan la paz, el bienestar y la prosperidad.

Es por eso que “Desde Acción Nacional condenamos la presencia del Grupo de Puebla y alertamos a la comunidad internacional sobre el riesgo que representa a la democracia, a las libertades y a la democracia”, concluyó la también Vicepresidenta de la Organización Demócrata Cristiana de América, (ODCA).