De enero a junio de este año, la pornografía infantil en el país creció en 118 por ciento en comparación con el mismo periodo del año pasado, de acuerdo al Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia CDMX.

El diputado local Luis Chávez García, lamentó la debilidad de la Fiscalía capitalina, para dar seguimiento a las denuncias y desmantelar a estos grupos que también son de trata.

“Desde el Congreso local queremos ayudar, queremos fortalecer a las áreas de inteligencia y también queremos darle a la policía de investigación todos los elementos para que no se lucre con la intimidad de los menores de edad en la Ciudad”, expresó.

El panista exhortó a la fiscal Ernestina Godoy, a realizar las investigaciones adecuadas, exhaustivas y expeditas, a fín de aplicar justicía y sancionar de manera ejemplar a los responsables de vulnerar el derecho al libre desarrollo psicosexual y a la intimidad de las niñas, niños y adolescentes, a través de la comisión del delito de pornografía infantil que se ha incrementado notoriamente en los últimos meses.

Además, solicitamos a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, por medio del DIF, dar información puntual para sobre las acciones realizadas para prevenir la pornografía infantil durante este gobierno.

“Han sido muy ausentes las políticas públicas encaminadas a erradicar este fenómeno, sucede desde el hogar con la falta de atención de padres de familia a sus propios hijos, no hay información disponible para detectar este patrón de conducta de los delincuentes”.

Luis Chávez García, se pronunció por candados de los sitios web o bien, anuncios por varios medios de comunicación para alertar a la población infantil de delincuentes que los buscan cooptar para sus intereses perversos.

“El DIF capitalino, por ejemplo, nos debe mucha información, ha sido un ente del gobierno muy opaco a lo largo de estos años con MORENA, no podemos permitir abusos ni más ultrajes a la vida íntima de los menores de edad que están, por ejemplo, ahí recluidos y que quizá hasta les toman fotos o son abusados”.

Lo mismo sucede con los menores en casa, pueden estar sometidos a amenazas de algún adulto o hasta familiar y trafican con su vida.