DE UCRANIA A ECATEPEC
Por René Mondragón.- DE QUE LOS HAY, LOS HAY
Hace algunas lunas, este mismo escribano servidor de ustedes, comentaba una nota formidable: Algunos hallazgos indicaban la posibilidad de que en Marte hubiera agua. Y el amanuense sostenía que, ojalá, también hubiera posibilidad de encontrar agua en Iztapalapa.
Al tiempo de agradecer a mis adorables lectoras y amables lectores la gentileza de enviar al suscrito la intervención del periodista Jorge Ramos en la mañanera, surgen los comentarios de esta entrega.
Primero, porque el presidente mexicano demostró que Pitágoras no tenía idea de lo que son las matemáticas, ni la aritmética, ya que cuando Ramos evidenció que el gobierno federal ya es “el más violento en la historia de México”, el mandatario -literalmente- tragó camote y cuando no pudo negar la existencia -con cifras del mismo gobierno- que ha habido 126 mil 206 asesinatos, el tabasqueño contestó como de costumbre: Sí, pero no, porque se resta el porcentaje que ha bajado la corrupción, si se suman los éxitos para inhibirla y se divide entre los muertos de Calderón y Peña, sumados a los problemas de violencia existentes en Estados Unidos, entonces, se demuestra que el gobierno de la 4T no es el más violento, sino que, incluso, la criminalidad ha bajado, como lo evidencian las cifras de secuestros.
Si quien me honra siguiendo hasta aquí no ha sido capaz de entender un ápice de la argumentación filosófico-teleológica y epistemocrática disertación presidencial, por favor, que no cunda el pánico. Seguramente, nadie lo entendió tampoco.
LA MAGIA DE NUEVO
Y así, como para que nadie se quede con un mal sabor de boca por el revolcón periodístico en Palacio, brincamos a la estratósfera de la diplomacia y la política internacional.
El tema lo distrajo -perdón- lo trajo a colación el jefe de jefes, que no es el mismo al que le cantaron los Tigres del Norte, sino al señor del balcón, cuando tundió con todo a la ONU. Los acusó de todo.
LA COMPARECENCIA EN ASAMBLEA GENERAL
Se creó una gran expectativa sobre el tema, particularmente, cuando se anunció la presencia de los mexicanos en la Asamblea General de la ONU. Expectativa en cualquiera de dos sentidos: Uno, el presidente iría a las Naciones Unidas a demostrarles cómo se hacen las cosas y la política de alta cocina en un despliegue de valentía modelo “Juan Escutia” o, en su caso, darle la vuelta al asunto y dejar que Marcelo Ebrard los llenara de epítetos que la censura nos impide reproducir.
Pasó lo segundo. El mandatario no asistió a la Asamblea. Sin embargo, el mensajero -no le quedaba de otra- también echó a andar su ronco pecho: Acusó al Consejo de Seguridad de la ONU (1) de estar “paralizado”; y para que se les quite, los invitó a asumir como propio, el plan de pacificación propuesto por el presidente mexicano, para pacificar el pleito entre Rusia y Ucrania. (2)
La respuesta fue polémica porque El asesor del presidente de Ucrania tachó a la propuesta de López Obrador de aprovechar la guerra para sus relaciones públicas (ídem) Agréguese que la intervención del Secretario Ebrard, también resultó anodina y fuera de lugar. Diálogo y diplomacia para resolver el conflicto. No hay nadie que se oponga a eso. Fue ocioso.
Por lo mismo, Arturo Sarukhán (3) sostuvo ante el reportero: La propuesta de paz mundial de AMLO es una proyección de su política de los abrazos.
Lo curioso del asunto es que, el presidente mexicano no puede resolver la violencia doméstica y ya quiere resolver un conflicto nuclear.
Habrá que darse una vuelta por Ecatepec, ¿no?
Palabras Clave: la ONU, violencia, diplomacia
https://www.infobae.com/america/mexico/2022/09/18/ante-critica-del-asesor-de-zelenski-amlo-acuso-a-sectarismos-de-atentar-contra-su-plan-para-pacificar-ucrania/