“El fin del Estado es pues, verdaderamente, la libertad”  Baruj Spinoza.

Mucho se ha escrito, y en lo personal de igual manera, sobre la importancia para la vida democrática de una Nación que haya división de Poderes, que haya un Poder Legislativo independiente y que rinda cuentas a la ciudadanía, que sea un contrapeso al Poder Ejecutivo y sea capaz de cumplir sus mandatos Constitucionales.

Muy pocos ciudadanos conocen a fondo las funciones del Poder Legislativo. Muy pocos conocen lo que es trabajar de manera conjunta por parte de los órganos colegiados para decidir sobre la conveniencia de la política pública a realizar en busca del Bien Común. Y órganos colegiados para la toma de decisiones y para la legalidad y vigilancia entre Poderes existen en las tres esferas de gobierno: El federal, el estatal y el municipal. Por eso la importancia de saber lo que hacen y como elegirlos.

Podemos hablar entonces, de la importancia de la división de Poderes; el barón de Montesquieu, en su libro El Espíritu de las Leyes, es el primero que plantea el problema de la división de poderes clasificándolos en Poder Legislativo, Poder Ejecutivo y Poder Judicial, resaltando la importancia que tiene ese orden de presentación. Sabemos pues, que sin división de poderes no hay constitucionalidad. Tras una larga tradición política, se busca el equilibrio de poderes para impedir el abuso de alguno de ellos. En este sentido, las instituciones democráticas fueron inventadas para quitarle poder al poder. Por lo que la división de poderes implica dos cosas: división funcional y división del trabajo, lo que supone una especialización, y que exista autonomía e independencia entre los poderes de la nación

En México José María Morelos y Pavón ya lo veía por eso en octubre de 1814, promulgó el Decreto Constitucional para la Libertad de la América Mexicana, conocido como la Constitución de Apatzingán. Declaró la soberanía del pueblo y el derecho de los mexicanos a elegir a sus representantes. Dividió el gobierno en tres poderes: Legislativo, Ejecutivo y Judicial.

Y después en todas las Constituciones y sus reformas siempre se respetó ese principio.

Las democracias indirectas, como la nuestra, tienen la característica de que los ciudadanos damos el poder de decidir a un grupo legislativo, nuestra soberanía como pueblo, la ponemos en manos de los representantes que elegimos para estar en el Poder Legislativo, es por eso que ellos se deben a nosotros y no a sus Partidos Políticos o al Poder Ejecutivo, ellos deben actuar en base a los mandatos del pueblo. Ese Poder debe funcionar como una organización que distribuye las funciones de gobierno a fin de dar a la ciudadanía, la seguridad de mantener íntegra su libertad. Por otro lado, dependiendo de cómo funcione la división de poderes, funcionará el régimen político.

Las funciones de los legisladores están perfectamente marcadas en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM) y las respectivas Constituciones Locales. Y son claras las acciones que deben de realizar, recordando que a los funcionarios públicos solo les está permitido hacer lo que les marcan las leyes. Son un Poder independiente, no supeditado a otro Poder. Son un contrapeso para evitar la tiranía.

El Poder Legislativo de los Estados Unidos Mexicanos se deposita en un Congreso General, que se divide en dos Cámaras: de Senadores y de Diputados.

La labor de los representantes de la nación es sumamente seria; Los legisladores, son representantes de su electorado, su labor social es muy amplia para con ellos. El Supremo Poder de la Federación se divide, para su ejercicio, en Legislativo, Ejecutivo y Judicial. No podrán reunirse dos o más de estos Poderes en una sola persona o corporación, ni depositarse el Legislativo en un individuo, salvo el caso de facultades extraordinarias al Ejecutivo de la Unión.

Lo fundamental es entender que además de las obligaciones conjuntas en la función de legislar cada Cámara tiene facultades exclusivas para dar mayor certeza y eso es importante conocer para decidir nuestro voto. Por ejemplo los Diputados tienen en exclusiva: Expedir el Bando Solemne para dar a conocer en toda la República la declaración de Presidente Electo que hubiere hecho el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Coordinar y evaluar a la Auditoría Superior de la Federación. Coordinar y evaluar a la Auditoría Superior de la Federación. Ratificar el nombramiento que el Presidente de la República haga del Secretario del ramo en materia de Hacienda. Aprobar anualmente el Presupuesto de Egresos de la Federación. Revisar la Cuenta Pública del año anterior, con el objeto de evaluar los resultados de la gestión financiera. Declarar si ha o no lugar a proceder penalmente contra los servidores públicos que hubieren incurrido en delito. Aprobar el Plan Nacional de Desarrollo.

Los Senadores en exclusiva deciden: Analizar la política exterior desarrollada por el Ejecutivo Federal. Aprobar los tratados internacionales y convenciones diplomáticas que el Ejecutivo Federal suscriba. Declarar, cuando hayan desaparecido todos los poderes constitucionales de una entidad federativa. Resolver las cuestiones políticas que surjan entre los poderes de una entidad federativa. Designar a los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, de entre la terna que someta a su consideración el Presidente de la República. Analizar y aprobar la Estrategia Nacional de Seguridad Pública.

Siguiendo esta idea, el Poder Legislativo, asume la función de controlar al Ejecutivo, limitando sus acciones presupuestarias y de control; de esta manera los poderes se controlan entre sí para que no haya amenazas a la libertad de los habitantes de una nación, conformando un sistema de equilibrio para evitar la concentración del poder. La principal particularidad de la democracia, es que la soberanía del poder proviene del pueblo, haciendo que la toma de decisiones sea tomada por la colectividad de los ciudadanos que son verdaderamente los patrones de los funcionarios.

Dicho todo esto, debemos entender que somos los ciudadanos los que debemos tomar el poder, que nosotros debemos votar para elegir a nuestros legisladores, es una obligación el salir a votar. Decía Fernando Savater “El ciudadano es el sujeto de la libertad política y de la responsabilidad que implica su ejercicio”.

Decide con tu voto que Poder Legislativo quieres. No se progresa creando diferencias sino igualando derechos. No más divisiones entre mexicanos. Queremos un Poder Legislativo fuerte e independiente.

Tomás Trueba Gracián.