IMPUNIDAD: EL PRINCIPAL CÁNCER DE MÉXICO: Por Tomás Trueba
“El pueblo inglés piensa que es libre y se engaña: lo es solamente durante la elección de los miembros del Parlamento: tan pronto como estos son elegidos, vuelve a ser esclavo, no es nada.”
Jean-Jacques Rousseau (El contrato social 1762)
Es un grave problema el que padecemos los mexicanos y como hemos normalizado la corrupción y la impunidad. La impunidad es una situación en la que una persona que comete un crimen, violación a las leyes, o un acto reprochable queda sin castigo por lo que ha hecho. Esto motiva a todos los ciudadanos a cometer actos reprobables pues saben que o pasará nada. Además de la tolerancia la normalización generalizada por parte de la población respecto a los actos de corrupción. Al saber de un acto de corrupción que queda sin castigo ya no les sorprende.
Y en México día a día vivimos estas situaciones con el agravante de que los que más cometen ilícitos son los que han jurado cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes que de ellas emanan. Son los gobernantes abusando de su fuero o de su poder los que abusan de sus cargos para aplicar la ley a su conveniencia. Más grave a pesar de violar la ley les aplauden y los hacen ídolos salvadores de sus vidas y de la Nación.
Mexicanos contra la corrupción presenta un documento donde concluye que la impunidad o la falta de castigo es la principal causa de la corrupción. Es sabido que la impunidad y la corrupción son problemas que afectan la correcta administración e impartición de justicia. Este es uno de los motivos por lo que el Estado de Derecho se encuentra en una profunda crisis en México.
La procuración de justicia, que se entiende como la actividad que realiza el estado para garantizar el cumplimiento del marco legal y el respeto a los derechos de los ciudadanos mediante la investigación de los delitos y el ejercicio de la acción penal. (Instituto Mexicano para la Competitividad, 2023). La impartición de justicia es la obligación que tiene el estado de garantizar el derecho de acceso de los gobernados a ella, la cual debe ser pronta, completa, imparcial y gratuita
El Artículo 17 Constitucional establece lo siguiente: toda persona tiene derecho a que se le administre justicia por tribunales que estarán expeditos para impartirla en los plazos y términos que fijen las leyes, emitiendo sus resoluciones de manera pronta, completa e imparcial.
Donde haya actos de corrupción que se mantengan en la impunidad, habrá menos derechos humanos. Un régimen político con peor calidad democrática tendrá más violaciones a los Derechos Humanos. Y analizando estas frases entendemos lo que pasa en México, no hay democracia para que no haya respeto a las leyes y a los Derechos Humanos; no olvidar el votar además de una obligación es un derecho y el voto debe ser libre, o sea sin presiones, sin amenazas sin coerción alguna y además secreto, no tener que divulgar por quien votamos.
Ya en algunas ocasiones he escrito sobre el tema de la legalidad. Ahora lo retomo por los tiempos que estamos viviendo. La historia nos marca como gobiernos que hemos tenido en las tres esferas: Federal, estatal y municipal han tenido vicios de corrupción, pero lo grave es que en el año 2018 millones de mexicanos votaron por un personaje que prometió ser distinto, que prometió acabar con la corrupción, que prometió acabar con los favoritismos, que prometió respetar la división de Poderes. Nada de eso cumplió al contrario se dedicó sin empacho alguno a violar todo lo violable y lo peor es que su poder, su credibilidad y su popularidad nunca cayeron.
Al día de hoy aún los mexicanos nos preguntamos qué pasó en la jornada electoral del 2 de junio, no aceptamos esa derrota tan avasalladora, no concebimos el carro completo que se llevó el Partido del Presidente y sus satélites. Pues para mí, además de lo expresado en mi anterior artículo, me queda claro que la razón de la falta de democracia y el aplastante triunfo de AMLO y su candidata fueron la impunidad y la corrupción.
El mismo López Obrador luchó y logró que fuera un delito que se castigara con cárcel cualquier intervención en el proceso electoral. Ellos siempre impugnaron las elecciones por el uso y abuso de programas sociales para ganar votos, por el acarreo y otras ilegalidades. Hoy lo hicieron a diestra y siniestra sin tener ninguna consecuencia. Me imagino si hoy hubiera sido al revé a López Obrador paralizando México, plantones, agresiones y un sinfín de desmanes.
Total impunidad para el inquilino de Palacio que constantemente desde su atril de las mañaneras atacaba a la oposición, mentía sobre las acciones a venir, impulsaba a su candidata y claro ella impulsaba a todos los candidatos de la continuidad del gobierno.
Otro acto de corrupción el que los candidatos del Presidente hayan gastado miles de millones de pesos, excedieron el 5% del tope de gastos de campaña Otro es el uso de los servidores de la Nación con sueldo del gobierno hayan hecho campaña y hayan amenazado ciudadanos. Lo peor como se apañaron del INE y éste no cumplió su función.
Muchas veces levantamos la voz por la ilegalidad de los Senadores de MORENA y sus aliados por no ejercer sus funciones para nombrar a los dos Magistrados que faltan en la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral, eso es corrupción e impunidad. Hoy no es legal el que los Magistrados de este Tribunal declaren la validez de la elección presidencial, falta uno para los seis que la ley manda. Claro sobre el tema hay muchas versiones y discusiones, pero yo me quedo con la versión de los que más saben y es que no procede lo que quieran hacer en el TRIFE.
Y por último a ver de que están hechas las autoridades electorales, que no les tiemblen las piernas, que no se pongan al servicio del Titular del Ejecutivo para hacer valer las impugnaciones y que en varios distritos electorales no les den el triunfo a MORENA y aliados y sobre todo, que no se apruebe ni valide la sobrerrepresentación legislativa. Aplicar la ley. Es el 8%. Ciudadanos esta debe ser ahora nuestra lucha queremos un Congreso de la Unión con el número de Legisladores que nosotros votamos, no lo que ellos impongan desde Gobernación.
Tomás Trueba Gracián.