Una de las más destacadas órdenes ejecutivas que firmó Donald Trump el pasado 20 de enero, recién jurado como presidente, es sobre las organizaciones terroristas extranjeras, las Foreign Terrorist Organizations abreviadas como FTO, que afectan la vida de los ciudadanos de Estados Unidos. Algo que afectará directamente a México en sus políticas interior y exterior.

En su orden ejecutiva sobre el terrorismo internacional, Trump ordena al Secretario de Estado inicie el proceso de declarar como FTO a diversas organizaciones criminales del extranjero. Nombró en particular a dos que operan a nivel internacional, una de Venezuela llamada “Tren de Aragua” y a la Mara Salvatrucha (más conocida), que se califican como terroristas globales.

La orden ejecutiva se encabeza: “Designando cárteles y otras organizaciones como Foreign Terrorist Organizations y organizaciones especialmente designadas como terroristas globales (Specially Designated Global Terrorists).”

Indica Trump en su orden ejecutiva que “Esta orden crea un proceso por el cual ciertos cárteles internacionales y otras organizaciones serán designadas como organizaciones terroristas extranjeras (Foreign Terrorist Organizations), conforme a determinadas disposiciones legales de su país que cita.

“Los cárteles, indica la orden ejecutiva, se han empeñado en una campaña de violencia y terror a través del Hemisferios Occidental que no sólo han desestabilizado países con importancia significativa para nuestros intereses nacionales sino también inundado los Estados Unidos con drogas mortales, criminales violentos y pandillas viciosas.”

Ordena el presidente Trump al Secretario de Estado que en 14 días (es decir el 3 de febrero) inicie las acciones apropiadas en consulta con el Secretario del Tesoro el Abogado General, el Secretario de Seguridad Interior y el director de la Inteligencia Nacional para hacer recomendaciones respecto a la designación de cualquier cártel u organización como Foreign Terrorist Organization y/o Specially Designated Global Terrorist. Una vez comunicada la decisión al Congreso y si éste no se opone en siete días, las designación hace efecto y se publica en el llamado Federal Register.

Por diversas referencias de discursos y comentarios de Trump, esto incluirá en particular cárteles mexicanos, que es lo que tiene muy alarmadas a las altas autoridades mexicanas, comenzando con Sheinbaum. Trump no ha dejado de considerar cualesquiera acciones para destruir a los cárteles criminales que califica como terroristas. Se ha hablado de acciones militares pero no considero que eso se llegue a dar. Como no se ha hecho contra cárteles colombianos ya clasificados como terroristas en diciembre de 2021 (son las más recientes), las FARC (y previamente en octubre de 1997) y la Segunda Marquetalia.

Dentro de los cárteles mexicanos que están en digamos la “lista de espera” están el cártel de Sinaloa, el CJNG, el del Golfo, los Zetas, los cárteles del Noreste, de Juárez, de Tijuana, de los Beltrán Leyva y la Familia Michoacana.

El proceso de designación como organizaciones terroristas no es simple, pues debe cubrir varias consultas y etapas, pero en el caso de los cárteles mexicanos, que tanto preocupan por el tráfico del fentanilo, se piensa que pasado ese proceso de varios días, unos de esos cárteles de México serán declarados terroristas, comenzando por el de Sinaloa y el CJNG.

El gobierno mexicano está muy confundido sobre lo que debe de hacer y se ha resistido a esta prevista designación de cárteles como terroristas, y es que a pesar de la abrumadora evidencia, los cárteles que eran de narcotráfico se han convertido en organizaciones criminales que están sembrando el terror en gran parte de nuestro territorio nacional.

Ahora bien, si pensamos en los criterios de Estados Unidos sobre los colaboradores de las organizaciones terroristas de México, podemos decir que quienes los financian y apoyan son ciudadanos de Estados Unidos, que compran, distribuyen y venden al consumidor, quien finalmente paga todo. El gobierno estadounidense puede tomar acciones en el extranjero pero como reza el dicho deberán empezar por su propia casa.

En resumen, la designación de cárteles mexicanos, en especial los del tráfico de fentanilo que hará el gobierno de Trump lo podemos dar como un hecho, y de allí se derivarán acciones eficientes de control y neutralización de los mismos por el gobierno morenista que tanto los ha protegido y de los cuales hay muchos razonamientos para pensar que lo han apoyado, incluyendo a políticos de gran poder en Morena.

Como decía el Quijote, “cosas veredes mio cid, que farán fablar las piedras”. Al gobierno mexicano morenista no le que quedará más remedio que colaborar con los vecinos del Norte y combatir (como hasta ahora no lo ha hecho) a esos grandes cárteles que tanto dañan a México. De esta manera, las acciones de gobierno de Trump serán muy útiles para la seguridad del pueblo mexicano. Ojalá así sea.