Revocación de mandato y consulta popular son parte de un andamiaje autoritario
Ciudad de México, 05 de noviembre de 2019.- El Partido Acción Nacional no está de acuerdo en apoyar la Revocación de Mandato y Consulta Popular porque es un peldaño en el andamiaje autoritario en ruta a los modelos como Bolivia, Ecuador, Venezuela, con un tufo autoritario que provoca más miedo que confianza, más incertidumbre que entusiasmo y más inestabilidad para un país atrapado en la parálisis.
Así lo expresaron los diputados del Partido Acción Nacional, durante la discusión del dictamen por el que se reforman y adicionan diversas disposiciones de la Constitución Política.
El diputado Elías Lixa Abimerhi expuso las razones por las que el PAN está en contra de esta reforma constitucional.
Dijo que para llegar a la revocación de mandato es necesario que lo solicité el tres por ciento del padrón electoral, más de 2 millones 700 mil personas y en esta lógica, sería algo parecido a crear más de 11 partidos políticos nuevos o tres veces más la gente que votó en la “encuesta patito” para cancelar el Aeropuerto de Texcoco.
Una vez reunidos los 2 millones 700 mil firmas, habría que validarlas con el voto del 40 por ciento del padrón, es decir, 36 millones de mexicanos. Y si se lograra tal requisito, el Congreso es quien nombraría al que sería el siguiente Presidente, no necesariamente por la vía democrática.
Y, por último, no hay claridad si habrá disponibilidad presupuestal en el Instituto Nacional Electoral para que haga la consulta.
El diputado Marcos Aguilar Vega aseguró en su intervención que el PAN apoyaría la figura si se aplicara para un próximo mandato, para que fuera imparcial y legislar con un propósito general y anónimo.
En cambio, dijo, “está hecha al servicio de su partido y de su gobernante, sólo para su conveniencia y en el camino contaminaron la figura y el instrumento por su descarado interés de manipulación política, no hay instrumentos neutrales en el proyecto de Morena”, precisó.
“La revocación der Mandato, su plebiscito revocatorio es un peldaño más de su andamiaje autoritario en ruta alineado de los modelos como Bolivia, Ecuador, Venezuela”, aseguró Aguilar Vega al destacar que en los tiempos de un gobierno con un tufo autoritario provoca más miedo que confianza, más incertidumbre que entusiasmo, más inestabilidad para un país atrapado en la parálisis de la desconfianza.
“No creemos en este gobierno porque no quiere el bienestar y la salud de millones de mexicanos, por eso vamos a votar en contra porque no confiamos en lo que proponen en la forma en que proponen y lo que quieren para México”, aclaró.
El diputado Ricardo Villarreal García exigió desde la tribuna que sea la revocación obligatoria, para que gane quien gane por los votos que sean.
“Y si en un país fallido como este, sumido en la delincuencia, en la crisis económica, en donde no hay empleos y no se genera ningún crecimiento económico, los mexicanos con razón votan por quitar al presidente, que se vaya, así voten 2 millones, 5, 10 o 25. La mayoría decide en cualquier instrumento democrático”, subrayó.
“No le saquen, hagan consultas reales y hagan revocaciones de verdad. Esto es una mera simulación”, expuso.
En su turno, el diputado Jorge Luis Preciado consideró que lo que se pretende hacer es para que nada cambie.
“Estamos modificando la Constitución para que no pase absolutamente nada, y creo que, si se viene aquí a decir que se le está dando al pueblo de México una herramienta democrática, no hay nada más alejado”, dijo.
Señaló que es la implementación de un sistema autoritario que está atentando lentamente y probando al pueblo de México a ver hasta a dónde puede resistir. “Lo hacen en Baja California, lo hacen con la reforma a la consulta popular, lo hacen con la revocación de mandato y, por supuesto, sí nos preocupa el tema de la reelección”, puntualizó.