Necesario analizar los compromisos que el gobierno impuso a México con el T-MEC
Ciudad de México 16 de diciembre de 2019.- México está ligado a Estados Unidos en muchos aspectos, no solamente en el económico. Para nuestro vecino del norte, nuestro país siempre le ha sido ventajosamente estratégico pues ha sido fuente de riqueza y de oportunidades a bajo costo, por lo que México nunca ha representado una amenaza seria a los intereses o soberanía de Estados Unidos. Lo que también se podría decir de Canadá.
En este contexto, la Diputada Silvia Garza, ante las condiciones bajo las que fue firmado este instrumento, señala si el T-MEC, que abre un nuevo capítulo de cooperación económica entre México, Estados Unidos y Canadá ¿salvaguarda los intereses del país? “y si más allá de los beneficios económicos que el T-MEC permita a México, es indispensable revisar si el acuerdo que se ha firmado.
El T-MEC ha introducido cambios significativos en relación con el TLCAN firmado en 1993: primeramente, tiene plazos perentorios, abriendo la posibilidad de negociaciones recurrentes a lo largo del tiempo; se introducen estrictas medidas en materia laboral y ambiental, que suponen también una supervisión constante en estas materias. Al respecto, la Diputada Garza señaló: “es necesario que el Gobierno Federal explique detalladamente los compromisos que asume a nombre de todos los mexicanos, especialmente cuando se abre la posibilidad de que Washington pudiera tener en sus manos el destino económico de México por la vía de constantes revisiones, inspecciones o candados a la política económica y monetaria del país”.
La Diputada Garza advirtió sobre la pérdida de soberanía nacional si México acepta cancelar opciones de desarrollo futuro en aras de mantener una relación de cooperación tan estrecha con Estados Unidos: “es necesario cuestionarse si un acuerdo comercial con Estados Unidos nos obliga a cerrar opciones de comercio internacional o a tener socios distintos a Estados Unidos y Canadá, particularmente el vibrante mercado asiático”.
En materia de desarrollo sostenible, preocupan los compromisos asumidos en relación con la capacidad real de cumplimiento del país. Al respecto señaló la Diputada Garza: “no es solamente la capacidad real de que México pueda no pueda cumplir con los compromisos y obligaciones en materia ambiental, es la voluntad real del gobierno actual de emprender esas acciones, sobre todo teniendo en cuenta el nulo compromiso presupuestal en esta materia”. ¿Cómo hablar de desarrollo sustentable cuando la inversión en programas relacionados con el medio ambiente en nuestro país es prácticamente de cero?.
También cuestionó la seriedad con la que participa México en el T-MEC, cuando apenas hace unas semanas se nombró al titular de Agencia de Seguridad Industrial y Protección al Medio Ambiente (ASEA), sin que este cumpla con los requisitos legales para ejercer el cargo, asimismo dijo: “seamos honestos, se aceptaron esos compromisos no por convicción sino por interés político de capitalizar como éxito un tratado comercial que todavía hay que analizar a profundidad”.
Finalmente, la Diputada Garza precisó la urgencia por negociar un acuerdo que debió tener el consenso de todos los actores políticos, económicos y sociales: “un acuerdo como el T-MEC tiene repercusiones a largo plazo, no podemos darnos el lujo de negociar sobre las rodillas y al vapor temas que pueden cancelar o minar la posibilidad de competitividad del país, lo que está en juego es la soberanía económica y hasta política de México y, sobre todo, las aspiraciones de bienestar de millones de mexicanos”.