Las Cámaras alta y baja de la nación, deben de transparentar totalmente su operación para evitar que se le siga dañando al único contra peso del gobierno federal: Eloísa Talavera Hernández

Durante el siguiente periodo ordinario de sesiones, se deberán de establecer los mecanismos para que las dos cámaras transparenten en su totalidad los recursos económicos que se utilizan, manifestó la vicecoordinadora de proceso legislativo de su bancada en San Lázaro, Eloísa Talavera Hernández al concluir el primero periodo ordinario de sesiones del segundo año de la 63 legislatura.

El Congreso de la Unión representa a las instituciones que le dan viabilidad a nuestro país, dijo, por lo que ser totalmente transparentes en la cámara de senadores y de diputados debe de ser un tema prioritario, para cumplir con uno de los objetivos fundamentales de los legisladores, ser un contrapeso al poder ejecutivo para darle balance y dirección adecuada a la nación.

Talavera Hernández refirió que las obligaciones que incluye la Ley General de Transparencia y Acceso a la Información Pública que se planteó en el pleno del Senado para salir a la Cámara de Diputados, permitirá dejar en el pasado la opacidad de los ingresos y egresos del Congreso de la Unión.

Explicó que la ley dice en su artículo 72, fracción 12, que los grupos parlamentarios del Senado y la Cámara de Diputados deben dar a conocer “las contrataciones de servicios personales señalando el nombre del prestador del servicio, objeto, monto y vigencia del contrato”, además en el numeral 13 ordena a los grupos parlamentarios a entregar un “Informe semestral del ejercicio presupuestal del uso y destino de los recursos financieros” dijo.

La legisladora refirió que hasta este año, la forma en que se gastan cantidades millonarias que se entregan a los grupos parlamentarios del Senado y la Cámara de Diputados, quedaban en el consumo interno de los legisladores federales, que cada mes o semestre son informados por sus coordinadores de los gastos que realizan, pues se espera que a más tardar hacia el último cuatrimestre del año los grupos parlamentarios abran sus cuentas a la consulta pública.

Talavera Hernández recordó que en 2015, cada uno de los 128 senadores de la República tuvo un costo presupuestal de siete millones de pesos superior al de cada uno de los 500 diputados federales, pues de acuerdo con los anexos del Presupuesto de Egresos de la Federación 2015, el Senado distribuyó entre sus bancadas mil 156 millones de pesos, mientras que los Diputados repartieron 980 millones 775 mil pesos.

Así, cada uno de los 128 senadores representó una inversión anual total de nueve millones 38 mil 916.36 pesos, mientras que cada uno de los 500 diputados federales implicó una inversión de un millón 961 mil 550.54 pesos; es decir, cada senador fue siete millones 77 mil 365.82 pesos más caro que un diputado federal.

Cortina de Humo

La legisladora federal, aseguró que a pesar de las grandes cantidades de dinero que genera cada legislador federal para el país, en términos del gasto que representa el gobierno federal desde sus Secretarios y Directores, es un porcentaje muy bajo.

Talavera Hernández subrayó que en el análisis de las finanzas públicas, el costo de los Secretarios de Estado en México debe de analizarse junto con los presupuestos operativos, en donde aseguró que esos puestos son mucho más onerosos que el de cualquier diputado o senador de la república, con un mayor número de recursos a su disposición y todo ello no está transparentado.

Necesitamos transitar en una república que sea verdaderamente transparente, en la que existan tabuladores y justificaciones para el uso de cada centavo que utiliza el gobierno en sus tres niveles, de otra manera continuaremos condenados a la opacidad y mantener un “estatus quo” que por décadas ha lacerado las finanzas públicas y la credibilidad de las instituciones, puntualizó.