Ciudad de México 30 de diciembre de 2020.- El cierre de actividades no esenciales en Puebla, contemplado hasta el próximo 11 de enero de 2021, es consecuencia del aumento acelerado de casos de coronavirus, derivado de la falta de control y organización del sector informal y la saturación del servicio de transporte público.

En los últimos meses, hemos sido testigos de los esfuerzos por parte el sector empresarial y comercial para contrarrestar los contagios. Demostrando una extraordinaria solidaridad, redujeron horarios de actividad, controlaron el aforo del público, mantuvieron las medidas sanitarias, pagaron impuestos, salarios y aguinaldos, con el fin de mantener a flote sus negocios y a sus colaboradores.

La pandemia no ha terminado y continuará lacerando la economía de Puebla. Este es un llamado a la autoridad a ordenar el espacio público que administra, a reforzar las medidas sanitarias, a generar incentivos a empresas que estén al corriente con sus obligaciones fiscales, a brindar créditos con tasas preferenciales y plazos amplios, y sobre todo a no enfocarse únicamente en el primer cuadro de la Ciudad.

Quiero expresar mi solidaridad con los representantes y agremiados de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), la Asociación de Centros Comerciales de Puebla (Accp), el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), el Consejo de Comerciantes del Centro Histórico y la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco), Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope), ante la frustración e impotencia que conlleva este nuevo confinamiento.

Estoy cierta que las tiendas departamentales, restaurantes, zapaterías, centros deportivos, mueblerías, complejos cinematográficos, entre otros comercios, se apegarán al decreto estatal emitido el pasado 28 de diciembre por el Gobernador del estado de Puebla, a fin de privilegiar la salud de las y los poblanos.

Por último, invito a la población en general a ser responsables, quedarse en casa en la medida de sus posibilidades, respetar las medidas sanitarias y apoyar el consumo local de restaurantes y comercios que ofrecen servicio a domicilio.

La salud y la seguridad está en manos de todas y todos. Saldremos adelante.