Cae a mínimos históricos vacunación de niñas y niños
Palacio Legislativo de San Lázaro, a 3 de agosto de 2022.- El cierre de los servicios de inmunización durante la pandemia de COVID-19 y la negligencia criminal del gobierno federal para garantizar el abasto y distribución de vacunas, provocará un resurgimiento de enfermedades que pueden prevenirse con una vacunación oportuna, que, en muchos casos, deben aplicarse desde los primeros días de vida del menor.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha advertido que las niñas y los niños no están recibiendo las vacunas que les pueden salvar la vida, en el caso de México, las bajas de tasas de vacunación representan una crisis de salud pública que no parece tener solución en el corto plazo, ante la indiferencia e incapacidad de las autoridades sanitarias de la federación.
La OMS ha manifestado que, cuando se interrumpen los servicios de inmunización, incluso durante breves periodos de emergencia, aumenta el riesgo de que se produzcan brotes de enfermedades como el sarampión, tuberculosis o el cáncer cervicouterino.
En México, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) 2021 publicada hace unos días ha puesto una alarma en el país, al documentar que solamente el 27.5% de los niños y niñas de un año de edad tuvieron esquema completo[1], cuando en 2015 el esquema completo era de 97.2 % y de 57% el año pasado 2020.
Se detalla también que, la cobertura de vacunación completa hasta los dos años es solo de 31.1%, totalmente un fracaso en términos de las coberturas históricas de vacunación en el país, lo que han padecido las madres y padres que no encuentran vacunas para los menores en las unidades médicas de todo el país.
¡Es un retroceso terrible que deja vulnerable a nuestras niñas y niños frente a enfermedades que son potencialmente mortales!
Además, la ENSANUT reporta que, la cobertura de vacunación contra sarampión y rubéola en adultos de 20 a 59 años fue de 16.6% según la cartilla nacional de salud.
La población sabe que las vacunas no están suministrándose a los más vulnerables, prueba de ello son los recientes brotes de Sarampión en todo el país. De acuerdo con la Dirección de Vigilancia Epidemiológica de Enfermedades Transmisibles de la Secretaría de Salud en 2020 se reportaron 196 casos de sarampión en México, la mayoría sin antecedente de vacuna[2].
La Agenda de Inmunizaciones 2030[3], como referencia, establece como meta coberturas de más de 90% por biológico, pero en México, vamos en retroceso, que de ninguna manera se justifica por la emergencia sanitaria, ya que la falta de vacunas en el país tiene como origen las fallas en el sistema de compras del gobierno federal y el pésimo funcionamiento de los mecanismos de distribución desde la federación a los estados.
En Guanajuato, los datos de vacunación son aún más críticos que la media nacional, con datos oficiales hasta agosto de 2022 se reporta la siguiente información respecto de las vacunas que ha mandado la federación a la entidad: