Elección judicial y voluntad ciudadana. Por Salvador I. Reding Vidaña

La elección del 1 de junio del Poder Judicial, con su muy, pero muy baja participación ciudadana (que incluye desde compra de votos hasta presión para votar y la inducción del voto con acordeones ilegales) demuestra que sus resultados, lo que decidan que son, no reflejan la voluntad ciudadana.
La verdadera voluntad ciudadana es la de la inmensa mayoría de ciudadanos que decidieron por diversas razones que no participarían en esta pantomima de elección. La voluntad ciudadana simplemente para nada, pero para nada muestra el apoyo ni a la elección ni a los candidatos que participaron.
La voluntad ciudadana en su abrumadora mayoría guardó silencio, así que si el gobierno habla de ella para decir que la ciudadanía votó a los nuevos ministros, magistrados y jueces mentirá. La voluntad ciudadana calló, no habló.
No se puede decir que los pocos ciudadanos que votaron son o representan la voluntad ciudadana, son una simple minoría que no representa ni puede representar la opinión de los ciudadanos, que no se expresaron en las urnas.