INCAPACIDAD TÉCNICA
Por Alejandro Díaz.- El dirigente formal del partido gobernante, sin que lo sea legalmente, es el inquilino de Palacio. Vive ahí porque no quiso aceptar hacerlo donde lo hicieron todos los Presidentes de México desde Lázaro Cárdenas a Peña Nieto, pero al mismo tiempo intenta repetir la Presidencia Imperial que floreció en México. Se quiso liberar del pasado yendo a vivir a un Palacio pero sus tácticas políticas parecen querer revivir tiempos pasados.
Sin duda el inquilino de Palacio tiene habilidad política y de comunicación. Diariamente utiliza dos horas para marcar agenda a los medios pero desperdicia el resto del día sin intentar que la estructura del gobierno federal funcione eficaz y eficientemente. No sólo no supo escoger a personas preparadas como Secretarios, los mantiene apenas como correas de transmisión de sus indicaciones casi sin aceptar sugerencia alguna. Las descargas del Valle de México que inundaron Tula y causaron la muerte de 16 personas en septiembre son muestran de su incapacidad.
Es increíble que a mitad del sexenio no se hayan reducido los homicidios dolosos que tanto criticó a sexenios anteriores, es más, este gobierno acumula una cifra mayor que la de los dos sexenios anteriores ¡juntos! (en 35 meses). En la mayor parte de los crímenes que más afectan a la población apenas hay avance a pesar de que la pandemia redujo la actividad… y de que hay una reunión diaria de expertos en seguridad.
La introducción de la Guardia Nacional, que debió ser un ente civil de complemento a las labores policiacas, se asignó a un Ejército mal preparado en Derechos Humanos. Esa decisión ya causó una crisis humanitaria, tanto en desapariciones como en control de manifestaciones.
En Salud tampoco hay logros que presumir: la pandemia afectó más a México que al resto del mundo por falta de realización de pruebas y por no haber exigencia del uso de mascarillas. La alta mortalidad de los trabajadores del sector es mancha indeleble en la labor del gobierno. La vacunación no ha sido bien llevada a cabo. A varios meses desde su inicio hay millones de personas sin vacunar y millones de vacunas por ser aplicadas. La falta de medicamentos es otra gran falla, que en el caso de niños con cáncer puede decirse es de lesa humanidad.
En energéticos el panorama también es triste, se intenta favorecer a las compañías paraestatales sin pensar en el planeta ni en los cambios tecnológicos. Se quiere elevar la producción petrolera, y la refinación, cuando el mundo persigue su extinción en defensa de la ecología. Además, porque los vehículos en pocos años ya no consumirán gas, gasolina o diésel, serán eléctricos o propulsados por hidrógeno. Se busca eliminar a generadores privados de electricidad con el argumento de proteger una empresa del Estado, pero ésta pierde dinero y encarece tarifas.
La crisis económica causada tanto por la impericia gubernamental como por la pandemia ha alejado inversiones necesarias para fortalecer el empleo. Aunque nos digan que ya alcanzamos los niveles prepandemia, la realidad es que siguen faltando el millón de empleos que anualmente requiere México para darle oportunidades a los jóvenes. Se han inhibido inversiones sin tener una estrategia para que las pequeñas y medianas contribuyan al desarrollo económico de todo el país.
La incapacidad técnica de la 4T para llevar a cabo planes, proyectos y obras la intentan suplir comisionando éstos a las fuerzas armadas en un intento de tener éxito. Sin que puedan por ahora garantizarlo, se acogen al prestigio de esas fuerzas sin poner algo de su parte. Es evidente que ellos solos no son capaces de hacer algo de provecho, sólo decir mentiras y verdades torcidas.
daaiadpd@hotmail.com