“La confianza continúa siendo un pilar fundamental para el funcionamiento del sistema de salud del país y el bienestar de los pacientes” Marina Saenz

Éctor Jaime Ramírez-Barba.- Por segundo año consecutivo, el “Edelman Trust Barometer 2023: Confianza y Salud” evaluó la confianza en nuestro sistema de atención sanitaria, el rol de las instituciones y empresas en la salud de la población y las actitudes individuales hacia la salud. Los diez hallazgos más significativos en México fueron:

1. Las desigualdades en salud reflejan desigualdades económicas. Globalmente, quienes tienen ingresos bajos tienen menos oportunidad de gozar de buena salud que aquellos con ingresos altos. En México, esta brecha en función de los ingresos es del 22%.
2. La inflación impacta nuestra salud. En muchos países, incluido México, la inflación y las restricciones de la pandemia han perjudicado la salud de la población.
3. El ideal de buena salud parece cada vez más lejano. El 57% de los encuestados en México siente que hay una brecha entre cómo cuidan su salud y cómo quisieran hacerlo. De este grupo, el 69% señala el costo de la atención médica como un obstáculo.
4. La percepción de salud es amplia y multidimensional. El 79% de los mexicanos considera que la salud física, mental, social y la calidad de su entorno son factores integrantes de su bienestar.
5. Se espera que todas las instituciones contribuyan a la salud. Además de las entidades de salud, se espera que las empresas de alimentos, tecnología, comercio y finanzas aseguren el bienestar de la población.
6. La confianza en familiares y amigos en temas de salud crece. La confianza en que estos seres cercanos proporcionen información veraz sobre salud ha crecido 13 puntos en el último año.
7. Hay un mayor interés por informarse sobre salud. Aun desde antes de la pandemia, los mexicanos buscan más información sobre salud. El 44% de jóvenes entre 18 y 34 años cree que una persona informada puede tener un conocimiento similar al de un médico.
8. Confianza y buenas relaciones promueven hábitos saludables. Una relación sólida con profesionales médicos y fe en el sistema de salud motiva a las personas a adoptar y mantener hábitos beneficiosos.
9. Los empleadores son figuras de confianza en salud. Se espera que establezcan políticas para prevenir el agotamiento y que los líderes empresariales promuevan la salud mental.
10. Las empresas deberían atender factores sociales que inciden en la salud, proveyendo información confiable, abordando desafíos como el cambio climático y la desigualdad y potenciando la salud comunitaria.

Un dato destacado es que el 96% de los encuestados en México relaciona la salud mental con el bienestar emocional; el 93% vincula salud física con actividades cotidianas y la ausencia de enfermedades. Es evidente que los mexicanos ahora ven la salud desde una perspectiva más holística.

Retal. El CONEVAL presentó los datos que sustentan lo dicho en inumerables ocasiones en esta columna: la buena salud de los pobres y vulnerables está cada vez más inalcanzable con SS-IMSS-Bienestar sin recursos y lleno de ideología. Señala el CONEVAL que en cuanto al acceso a servicios de salud, las estadísticas muestran un aumento preocupante en la carencia de estos servicios. Entre 2018 y 2022, el porcentaje de personas sin acceso a la salud aumentó del 16.2% al 39.1%. Esto se traduce en un incremento de 30.3 millones de personas que carecen de estos servicios, pasando de 20.1 millones en 2018 a 50.4 millones en 2022.

La medición multidimensional de la pobreza en 2022 indica que, ojo, sólo el 13.1% afirmó tener acceso a los servicios de INSABI, que fue creado para ofrecer salud a quienes carecen de seguridad social.

El Cuadro 26B de la misma medición señala que, mientras en 2018 el 42.1% de la población estaba afiliada al Seguro Popular, para 2022 ese número se redujo al 13.1%. En cifras absolutas, esto representa una disminución de 35,250,043 personas. En 2018, 52,135,043 personas estaban afiliadas al Seguro Popular, y en 2022 sólo 16,885,009 tenían derechos bajo INSABI o el Seguro Popular.

Estas estimaciones del CONEVAL son evidencia clara y contundente del fracaso de las políticas de salud del gobierno actual. A pesar de los recursos invertidos en la atención de las poblaciones más vulnerables, sigue siendo patente la incapacidad del gobierno para abordar adecuadamente los desafíos de nuestra sociedad. Las familias más desfavorecidas enfrentan ahora un mayor empobrecimiento y carencias crecientes.

El mismo CONEVAL subraya la preocupación, destacando los desafíos de la persistencia de pobreza extrema, el incremento en la carencia de acceso a servicios de salud y la alta proporción de trabajadores sin acceso a seguridad social. En el Frente Amplio Por México habrá propuestas para dar Acceso Universal a la Salud.