Ciudad de México, 19 de julio de 2021.- A casi tres años de gestión federal, el gobierno es incapaz de atender las necesidades de servicios de salud de la población. Al paso que vamos ni siquiera se alcanzará el compromiso de incrementar la infraestructura en las instituciones del Sistema Nacional de Salud, especialmente, el comprometido para las regiones con alta y muy alta marginación, afirmó el Diputado Federal Éctor Jaime Ramírez Barba, Secretario de la Comisión de Salud de la Cámara de Diputados.

Dijo que el pasado 30 de junio, la Secretaria de Hacienda y Crédito Público (SHCP), entregó al Congreso los avances de programas y proyectos de inversión de enero a mayo de este año. Con esos datos, se pone en evidencia que la ejecución de la inversión autorizada a las Instituciones médicas es mínima, por la irresponsabilidad del gobierno de MORENA que repercutirá directamente en la atención de las y los mexicanos.

El documento revela el bajo nivel de inversión en salud, y que gran parte de lo presupuesto, por increíble que parezca, no ha sido ejecutado; dejando la duda de si al siguiente mes la SHCP desviará por enésima ocasión los recursos asignados a la salud para mandarlos a los programas presidenciales “prioritarios”, es decir, sus obras faraónicas.

Ramírez Barba aseguró que en el Avance Físico y Financiero de los Programas y Proyectos de Inversión Enero-Mayo 2021 no se ha ejercido un peso en programas o proyectos autorizados para atender la COVID-19.

Además, el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (INSABI), no ejerció, 254 millones de pesos para la adquisición de equipo médico.

Tampoco se han ejercido:

•68 millones de pesos en el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER) para la adquisición de equipo diagnóstico y tratamiento.

•3 millones de pesos para rehabilitación post COVID

•33 millones de pesos en el Hospital General de México para equipamiento.

•7 millones de pesos en el Instituto Nacional de Nutrición y Ciencias Médicas Salvador Zubirán para la adquisición sistemas para terapia de oxigenación.

El presidente de la República ofrece que habrá muchos hospitales, sin embargo, hay pocos programados para este año, y de ellos casi ninguno ha iniciado siquiera como: el Hospital General en Chetumal con 120 camas (717 mdp); el Hospital General de Huajuapan de León en Oaxaca (189 mdp); el Hospital General de Tepic con 120 camas (139 mdp); la Unidad de Hospitalización para mujeres de Iztacalco, en la Ciudad de México (42 mdp); el Centro de Salud ampliado en Progreso, Yucatán (4 mdp); así como la construcción del Centro Nacional de Referencia de Salud Animal CNRSA (539 mdp).

En el equipamiento de áreas médicas, laboratorios y equipos de máquinas también carece de inversión: como en los servicios de salud mental del Hospital Central Militar (11 mdp); en el Centro de Control Analítico y Ampliación de Cobertura Laboratorio (50 mdp); en la Marina el centro de mantenimiento biomédico (19 mdp) y equipo médico, odontológico y de laboratorio (147 mdp).

El INSABI además lleva cero pesos ejercidos en el equipamiento del Hospital General en Guerrero (141 mdp); en la sustitución de 200 unidades médicas móviles (430 mdp) y en el equipamiento del Centro de Rehabilitación y Educación Especial de Tepic Nayarit (30 mdp).

Las Instituciones de la Seguridad Social presentan avances muy similares, por ejemplo, el ISSSTE tiene cero pesos ejercidos para el equipamiento médico en unidades del tercer nivel (512 md).

“¿Así cómo podrá haber ya no digamos salud “Nórdica”; sino mínimamente una atención digna? Por ello, es necesario hacer un llamado enérgico para que se inicien las inversiones en los programas y proyectos. La salud no puede esperar más, sentenció Ramírez Barba.

Lo anterior muestra que, si bien en el discurso se dice que se buscará fortalecer el sistema de salud, en los hechos no se hace lo necesario para atender las necesidades de infraestructura en salud, que requiere nuestro sistema público de salud para poder brindar una atención de calidad para toda la población sin seguridad social.

Es necesario que desde la propuesta de presupuesto para el 2022 que el gobierno federal enviará en septiembre a la Cámara de diputados, se considere una ampliación sustantiva de recursos para la infraestructura en salud; es necesario resarcir el rezago de los 3 últimos años en el mantenimiento de infraestructura, fortalecer el programas de adquisiciones y destinar lo necesario para nuevos proyectos de infraestructura hospitalaria, – detalló Ramírez Barba.

Por lo anterior, en la Comisión Permanente del Congreso de la Unión demandaremos al Secretario de Hacienda, al Secretario de Salud y al inoperante INSABI, remitir un informe detallado del presupuesto público destinado a la infraestructura en salud y a atender los rezagos en el ejercicio que presenta el Presupuesto de Egresos de la Federación 2021 destinado a la infraestructura, equipamiento e insumos para la salud, finalizó el legislador federal.