Tomás Trueba Gracián.-

“La demagogia es la capacidad de vestir las ideas menores con las palabras mayores” A. Lincoln

Septiembre, el mes patrio. Septiembre el mes de los movimientos, bueno movimientos telúricos, al igual que de huracanes y más desastres. Pues en la política mexicana no hay excepción, hay movimientos raros, hay huracanes y desastres por las mentiras y por los números que se manejan en el informe presidencial. Iba a decir el tercer informe, pero ya van como diez, sin contar los informes de campaña de las mañaneras.

Y sí no hay nada peor para una Nación que un demagogo ya que acaba haciendo pagar a su Nación un precio muy caro. Pero peor es la hipocresía y la mentira en cualquier ser humano eso es deleznable pero lo es más aún en quienes tienen el honor de gobernar. Mucha tinta, mucho tiempo.

Muchas caricaturas y muchos mensajes se han mandado en favor y en contra de este gobierno, lo único malo es que en general no han servido de nada.

Cuando el Titular de un Poder no acepta nada más que lo que le conviene y que siempre “tiene otros datos” parece que se pierde el tiempo en hacer críticas y buscar mejoras.

Cuando ese personaje no es capaz de oír y tiene su ego soberbio por arriba de todo y de todos es imposible que cambie el rumbo.

Hoy en su mensaje Andrés Manuel se jactó de mil y un cosas que no deben ser motivo de jactancia y además siguió ofendiendo y retando a los mexicanos. Nunca fue capaz de reconocer sus errores pero sí enfatizó que seguirá con sus locuras de política. Desde luego que Andrés Manuel sigue siendo el gran triunfador de la política en México, no pierde ni una pluma de ganso para hacernos una almohada.

El señor lleva tres años haciendo lo que quiere, lleva tres años provocando daños al erario, lleva tres años mintiendo, lleva tres años con una corrupción que aumenta, lleva tres años de muertes incontables por enfermedad, por violencia. Sigue mintiendo que el pueblo manda. Y así podemos enumerar muchos programas que ha quitado, podemos enumerar acciones que nos regresan al pasado de desastres económicos, pero el pasado 6 de junio fue el candidato ganador otra vez.

Sí fue el candidato ganador, nunca ha dejado de hacer campaña, nunca ha dejado de ser el portavoz de las masas, nunca ha dejado de meter las manos de manera ilegal en los procesos electorales y claro la gente que no piensa o que quiere cobrar venganza por resentimiento, o la gente que recibe los regalos de miles de pesos cada mes y algunos pocos convencidos, pues votan por todo lo que huela a MORENA y en contra de los malos.

Sigue presumiendo de sus ahorros y da cifras estratosféricas de ahorro por las compras, pero no dice que hay gran corrupción en las compras que más de 70% de las mismas son asignación directa, no dice que ahorra porque no hay compras, porque no se invierte en donde se debe. Puede más el mensaje diario ocurrente de Andrés Manuel que todo lo que se demuestre que está haciendo mal. Está tan mal que lleva más de 25 cambios de funcionarios de alto nivel en su gabinete y los que faltan.

Pero no saca a los que debe de sacar.
Son tan prepotentes en MORENA que ya ven entre otras cosas lo que acaba de pasar en la Ciudad de México y el títere corrupto que tiene Andrés Manuel como Jefa de Gobierno, que también tiene muertes en su conciencia sale con su tontería de que no es un circo. Circo los que hacían ella y su jefe y payasadas las que siguen haciendo. Deben respetar a los funcionarios electos, a ellos también los puso el pueblo sabio. Y por cierto como urge una reforma a la Constitución de la Ciudad de México para darle la fuerza necesaria a las alcaldías.

Hoy nuevamente Andrés Manuel amenaza con reformas retrógradas para tener más poder y hundir más a México. Es preocupante ver la insistencia del retroceso en materia energética, es preocupante ver el engaño de la Guardia Nacional, por cierto otra más de sus mentiras, es preocupante ver cómo quiere acabar con el poder de la ciudadanía modificando al INE y al TRIFE, dos instituciones que costó mucho trabajo crear.

Pero lo más preocupante en todo este panorama es darnos cuenta que los Partidos Políticos no cumplen su función. Y son todos, los afines al Titular del Ejecutivo por darle todo en bandeja de plata sin importar el ciudadano y los de oposición por no tener presencia ni tener acompañamiento al ciudadano. Acá preocupa más Acción Nacional un Partido que siempre se preocupó por la libertad, la democracia, la creación de ciudadanía, por la ética en la política y que ha perdido rumbo.

Preocupa ver que Acción Nacional no es autocrítico, que cae en el triunfalismo de su presidente nacional y de sus presidentes estatales. Preocupa ver que ahora en esta vorágine política que vivimos, que nos está llevando al abismo, no sean capaces de retomar sus principios, su razón de ser y tener un proceso de elección interna democrática y sin trampas. Predomina el apetito personal de su actual líder nacional y de sus allegados, no ven el Bien Común, solo su huertito de vanidades. Eso lo pagarán caro por no pensar en la ciudadanía.

En conclusión o nos educamos y nos volvemos ciudadanos de primera para exigir resultados o nos hundimos más pero eso sí con los datos felices del tirano Andrés Manuel de sus mañaneras. Abrir los ojos para salir adelante. No es atacar por atacar, es decir la verdad. Es aplaudir lo poco muy poco bueno que tenga y pedir corrija todo lo malo que ha hecho.

Tomás Trueba Gracián.