“No se invita a quien ha insultado una y otra vez a México”, manifestó la senadora Gabriela Cuevas Barron, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Senadores.

“Si Trump quiere venir a México, que primero se disculpe, dijo, y llamó a crear un frente plural en contra de esta visita, en rueda de prensa en la que estuvo acompañada por la vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PAN, Mariana Gómez del Campo; los senadores Juan Carlos Romero Hicks y Fernando Yunes Márquez, así como por el diputado Armando Rivera Castillejos.

Cuevas subrayó que lo que está en juego es la dignidad de México. “De eso se trata la política exterior, de la defensa de la soberanía, la defensa de nuestra dignidad. Y no está bien, bajo ningún ángulo, que el gobierno de la República pretenda jugar con esa dignidad y con esa soberanía”.

La senadora citó un reciente comentario del historiador Enrique Krauze, quien expresó: A los tiranos no se les apacigua, se les enfrenta.

“Prender que un xenófobo, un misógino, un abiertamente antimexicano, venga invitado por el presidente de la República a nuestro país, a nuestra casa, es, a todas luces, inadmisible, es indignante”, puntualizó.

La legisladora señaló que la labor de nuestro gobierno es la de defender a los mexicanos. “Nuestra dignidad es nuestra soberanía. No puede ser nuestro gobierno el mismo que hace unos meses hablaba de Trump, comparándolo con Hitler, el que hoy decida invitarlo a nuestra casa a tomar un café”.

Gabriela Cuevas indicó que para Trump esta visita no es un café, es un acto de campaña.

Recordó que mientras México, durante muchos meses, dijo que no iba a intervenir en el proceso electoral de Estados Unidos, hoy el gobierno de Enrique Peña Nieto interviene de la peor manera: apoyando a aquel candidato que odia a los mexicanos y que hoy está muy lejos de tener una posible victoria.

“Que quede muy claro: si bien el gobierno de la República invitó a Donal Trump, los mexicanos rechazamos, tajantemente, esta invitación. Trump no es bienvenido en México”, aseveró.

SENADORA MARIANA GÓMEZ DEL CAMPO GURZA (MGCG): Muy buenos días tengan todas y todos ustedes. Agradecemos la presencia de los medios de comunicación esta mañana, y queremos los diputados y los senadores de Acción Nacional dar un pronunciamiento sobre la visita el día de hoy de uno de los candidatos a la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump, y primero hará uso de la voz la senadora Gabriela Cuevas.

SENADORA GABRIELA CUEVAS BARRON (GCB): Muchas gracias, senadora. Muchas gracias a todas y a todos por estar hoy aquí.

Me parece que hoy todos compartimos un sentimiento, una sensación común, y es una profunda indignación al ver, en primer lugar, que nuestro gobierno invitó al señor Donald Trump a venir a México.

Más allá del contenido de la visita, no se invita a un candidato a una reunión con el presidente de la República y mucho menos se invita a quien a insultado una y otra vez a México y a los mexicanos.

Hoy lo que está en juego es la dignidad de México y de eso se trata la política exterior: de la defensa de nuestra soberanía, de la defensa de nuestra dignidad y no está bien, bajo ningún ángulo, que el gobierno de la República pretenda jugar con esa dignidad y con esa soberanía.

Bien lo decía hace un par de horas Enrique Krauze: “a los tiranos no se les apacigua, se les enfrenta”. Pretender que un xenófobo, un misógino, un abiertamente antimexicano venga invitado por el presidente de la República a nuestro país, a nuestra casa, es a todas luces inadmisible, es indignante.

La labor de nuestro gobierno es la de defender a los mexicanos. Nuestra dignidad es nuestra soberanía. No puede ser nuestro gobierno el mismo que hace unos meses hablaba de Trump comparándolo con Hitler, quien hoy decida invitarlo a nuestra casa a tomar un café pero.

Pero, otro lado, vemos que para Trump no es un café, es un acto de campaña. Mientras México durante muchos meses ha dicho que no iba a intervenir en el proceso electoral de Estados Unidos hoy el gobierno de México interviene e interviene de la peor manera, interviene apoyando a aquel candidato que odia a los mexicanos y que hoy está muy lejos de tener una posible victoria.

Que quede muy claro: si bien el gobierno de la República invitó a Donald Trump los mexicanos rechazamos tajantemente esta invitación. Trump no es bienvenido en México.

Ante ello y ante toda esta indignación no sólo de muchos políticos que ya lo han manifestado, sino claramente de los mexicanos que están en México, pero sobre todo aquellos que hoy han enfrentado graves hasta represalias, como hubo mexicanos golpeados en Estados Unidos por seguidores inspirados por Trump, hoy nosotros desde Acción Nacional queremos, primero, exigir la cancelación de esta reunión. El presidente de la República está a tiempo. Exigimos que se cancele esta reunión, que no tiene ningún sentido. Si Trump quiere venir a México, primero que Trump se disculpe.

En segundo lugar, queremos hacer una convocatoria: crear un frente plural contra esta visita, un frente plural que vaya mucho más allá de los partidos, un frente plural basado en el rechazo de la sociedad y una ciudadanía que está indignada y que lo que espera es una clase política que defienda los intereses nacionales, no las coyunturas electorales, mucho menos aquellas que están fuera de nuestras fronteras.

En tercer lugar, queremos un debate, un debate público con el presidente de la República en torno a la política exterior de nuestro país. En estos temas no es para andar experimentando. Lo que está en juego es el Estado mexicano, es la dignidad y la estatura de México y eso no está para regateos ni mucho menos para ocurrencias como invitar a Donald Trump.

Ojalá que nos equivoquemos, pero no vemos un solo escenario en el que México tenga algo que ganar con la visita de Donald Trump, un personaje que no ha sido recibido por ningún otro mandatarios; ha sido rechazado por el presidente de Francia, ha sido rechazado en el Reino Unido, y a aquellos a quienes ha insultado más son los primeros que le ponen la alfombra roja para llegar a la Residencia Oficial de Los Pinos.

Ese es el mensaje de México, aquel que no está negociando como pares, sino aquel donde el presidente negocia con un candidato y no con un candidato cualquiera, con el único candidato que le ha apostado a destruir a México. Esa no es política exterior, eso no es lo que se espera del gobierno. Los mexicanos estamos indignados y exigimos la cancelación inmediata de esta reunión.

MGCG: Senador Juan Carlos Romero Hicks. Muy bien, muchísimas gracias. ¿Alguna pregunta, comentario?

PREGUNTA (P): Senadora, ¿esto obligaría al presidente Enrique Peña Nieto a extender su invitación a Hillary Clinton? La opinión que les merezca también Hillary Clinton, su equipo de prensa, inmediatamente que se dio a conocer este encuentro.

GCB: Desde que se dio a conocer este encuentro, que además hay que decirlo, nos enteramos por el Washington Post, no por las autoridades mexicanas, desde que se dio a conocer este encuentro Hillary Clinton ha escrito dos tuits, y en estos dos tuits es la misma Hillary Clinton quien nos recuerda a México cómo Trump ha ofendido a México y a los mexicanos. Pareciera que nuestro gobierno no tiene memoria, pero la candidata demócrata en los Estados Unidos sí.

Es una pena que ese sea el mensaje de México hacia los mexicanos y hacia nuestros connacionales en los Estados Unidos.

P: Buenos días. Yo quisiera preguntar: bueno, es entendible esta molestia por la visita, pero ¿cuál es la alternativa frente a la posibilidad real; ya es candidato, de que llegue a la Presidencia de su país y tenga que lidiar con nosotros y nosotros con él?

GCB: primero, si observamos las encuestas y todo el camino de opinión pública que han tenido los Estados Unidos en estos meses, hoy es el peor momento electoral para Donald Trump.

Ha sido absurda la reunión en México con el Presidente Peña. Es rescatar a alguien que empieza a agonizar en las encuetas, en darle un evento en México al país al que ha insultado. Es el primer mandatario en tenderle la mano al xenófobo, al tirano. Eso es inadmisible bajo cualquier perspectiva.

Y, en segundo lugar, un presidente de la República negocia con sus homólogos, no con candidatos.
Gracias.