Todo mundo sabe que una alianza PAN-PRD, haría muy posible el triunfo sobre el PRI en las elecciones del 2017 en el Estado de México. Sin embargo, sorprende el empeño de los líderes de ADN, como el diputado local Héctor Miguel Bautista y el senador Luis Sánchez, en cerrar las posibilidades de que dichos partidos vayan unidos en contra de la maquinaria del partido en el gobierno. Inexplicable pero no tanto, pues en política donde no hay explicación lógica a una acción, la explicación es seguramente económica, o como se dice en español popular, la explicación es el “maiceo”.

Este tema del “maiceo” a los líderes del ADN, MOVIDIG, originarios de Neza, es un tema bastante conocido en los corrillos políticos del Estado de México. Por lo que afirman quienes les conocen, estos políticos de “izquierda” son adictos a los billetazos y se han puesto al servicio de quien los acribilla permanentemente con bombazos de dinero.Como decían las abuelitas, para muestra basta un botón: durante el tiempo que Héctor Miguel Bautista fue coordinador del Grupo Parlamentario del PRD mexiquense, nunca tuvo un pronunciamiento en contra del gobernador Eruviel Ávila y más recientemente la mega campaña del diputado local Juan Zepeda, resulta inexplicable a la luz de los recurso de dicho personaje y sólo se entiende sí se toma en cuenta de donde provino dicha “lana”

Tristemente podrían ser ellos quienes enterraran la posibilidad histórica de darle al Estado de México la oportunidad de vivir la alternancia en el poder del Gobierno Estatal. 

Es la izquierda vergonzante, cuyos líderes viven como lo que siempre criticaban desde la ideología: como capitalistas. ¿A poco no?