Ciudad de México.- Serán 155 mil casillas las que se instalarán en todo el territorio nacional el primero de julio, que serán operadas por un ejército de más de 1 millón 400 mil ciudadanos que fueron reclutados por el Instituto Nacional Electoral (INE) y cuyas vidas dependerán del Estado Mexicano que ha probado su ineficiencia con una violencia política que nunca antes se había visto en el país, señaló la Vicecoordinadora de Proceso Legislativo de su bancada en San Lázaro, Eloísa Talavera Hernández.

La legisladora explicó que el INE insaculó al 12% del listado nominal para contratar a los Capacitadores Asistentes Electorales (CAE) y a los Supervisores Electorales (SE) quienes mantendrán auxiliarán a las Juntas Locales y los Consejos Distritales del Instituto, en los trabajos de visita, notificación y capacitación de los ciudadanos para integrar las mesas directivas de casillas; identificar el lugar para su ubicación y recibir y distribuir la documentación y materiales electorales.

“El gobierno de Enrique Peña Nieto ha sido incapaz de blindar el proceso electoral; hoy vivimos el más sangriento en la historia reciente de México con 114 políticos asesinados arteramente, lo que va generando una gran desconfianza para la jornada electoral del primero de julio”, dijo.

Agregó que la estrategia de seguridad para el día “D”, además de blindar en su totalidad a las y los ciudadanos que participarán como CAE y SE, tendrá en sus manos el bienestar de los representantes de partido y de 89 millones de mexicanos inscritos en el listado nominal que tendrán la oportunidad de ejercer su derecho al voto.

Talavera Hernández subrayó que cuando el crimen organizado asesina a un precandidato o a un candidato, mina en su totalidad las estructuras del estado y de la democracia mexicana, lo que representa un atentado a la seguridad nacional y debe de ser detenido.

Indicó que hasta mayo, se habían acreditado 112 visitantes extranjeros de 33 países para participar como observadores en la jornada electoral del primero de julio, lo que representa el reto, primero de salvaguardar sus vidas ante la creciente ola de violencia y segundo, que el reporte que ellos den a la comunidad internacional, sea positivo para México.

Es lamentable, dijo, que Enrique Peña Nieto haya dejado de gobernar, que haya decidido –nadar de muertito- y no haber blindado eficazmente el proceso electoral 2018 en el que se llevarán a cabo 30 elecciones locales concurrentes y tres de carácter federal en las que se disputan 3 mil 400 cargos de elección popular, incluidos el Presidente de la República, la Cámara Alta y Baja de la nación.

Adelantó que en la Comisión Permanente de la Cámara de Diputados, presentará un exhorto para que la Procuraduría General de la República, en conjunto con las fuerzas armadas nacionales, establezcan no nada más una estrategia para salvaguardar la integridad de la ciudadanía, sino para generar un protocolo que durante el día D y las siguientes semanas, sirva a los ciudadanos participantes para tomar decisiones asertivas ante cualquier incidente que ponga en riesgo sus vidas.

Puntualizó que el pésimo trabajo del gobierno Peñista, ha puesto los ojos del mundo en México en un contexto de desconfianza, miedo e incertidumbre, lo que lacera la competitividad, la confianza y aumenta el riesgo de todo interés para invertir en nuestro país.