Ciudad de México.- La senadora Pilar Ortega Martínez hizo un llamado al Poder Legislativo a concretar una “reforma importante y trascendental” para combatir la violencia en contra de las mujeres, en particular las que viven en el medio rural.

Durante su participación en la inauguración del seminario “La participación política de las mujeres rurales. 100 líderes del México rural”, Ortega Martínez dijo que la violencia política contra las mujeres es la causa de que muchas “tengamos impedimentos serios para el desarrollo del liderazgo político y para una plena participación política.”

En ese sentido, consideró que la posibilidad real de que la mujer tome decisiones en el ámbito político es un incentivo fundamental para lograr la transformación en todos los campos de la vida social y económica de México, a favor de mayores espacios, pero sobre todo de lograr la plena igualdad entre mujeres y hombres.

Ortega Martínez, presidenta de la Comisión de Justicia del Senado de la República, dijo que es necesario impulsar la participación de las mujeres rurales en la política y armonizar el liderazgo que han desarrollado en sus comunidades con la actividad pública.

“Las condiciones sociales y económicas de las distintas mujeres en el ámbito rural son factores que hacen más complicada la posibilidad de acceder a espacios de poder; sin embargo, también existen casos en los que muchas mujeres no tienen la información suficiente para decidirse a participar de manera formal, aunque han desarrollado claros liderazgos sociales”, apuntó.

En la inauguración del seminario “La participación política de las mujeres rurales. 100 líderes del México rural”, la legisladora por Guanajuato sostuvo que existe el desafío de armonizar el liderazgo que la mujer rural desarrolla en el ámbito del ejido con la función política.

“El fortalecimiento de la participación de las mujeres rurales debe considerarse una acción que incluya no solamente el mejoramiento de las mujeres, sino el mejoramiento y el desarrollo óptimo de toda la sociedad”, remarcó.

La mujer rural, agregó, sigue enfrentando graves dificultades para cumplir con eficacia sus múltiples papeles en la familia y en la comunidad, ya que, a menudo, sus derechos y sus prioridades no se les da la importancia suficiente.

La senadora panista expuso que en el informe sobre “El estado mundial de la Agricultura y la Alimentación 2016”, de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, se señala que las mujeres rurales representan en promedio el 43 por ciento de la fuerza laboral agrícola.

Sin embargo, dijo, se encuentran especialmente desfavorecidas, con menos recursos y derechos que los hombres, con un acceso incluso limitado a la educación formal, a la información y los servicios, con responsabilidades domésticas determinadas por el género, relacionadas con la exclusión en la toma de decisiones y una carga de trabajo agrícola cada vez más pesada, debido a la emigración masculina, sostuvo.

Ortega Martínez aseveró que aún existe una brecha en detrimento de las mujeres en el acceso a la toma de decisiones y a los espacios de liderazgo, destacándose los problemas observados en la calidad y tipo de participación de las mujeres y la valoración que le otorgan las comunidades.

Debido a sus condiciones sociales, económicas y geográficas, abundó, para las mujeres rurales es más complicada la posibilidad de acceder a cargos de toma de decisiones.
“La adquisición de poder de las mujeres es un medio para terminar con la desigualdad en la que vivimos”, señaló.