NOS VEMOS A LAS 6
Por René Mondragón.-
LA TAUROMAQUIA EN PALACIO
Uno de los factores más admirables en el manejo de la política interior de nuestro país, es el estilo presidencial de ejercer lo que este escribano califica como la “Tauromaquia Política”. Es decir, el mandatario es bueno y temerario para recibir a los periodistas que más detesta –como Ciro Gómez Leyva, Raymundo Riva Palacio, López Dóriga, Loret de Mola o Carmen Aristegui- “a porta Gayola”, esa suerte de la fiesta brava donde el torero espera al toro de rodillas enfrente de la puerta de toriles, antes de que el animal salga al ruedo. Nunca le ha funcionado para hacer una faena porque siempre se le revierte y acaba por dar clases de historia a jirones y más tarde, inventar otro distractor para sus fans.
ALARMANTE
El problema para el presidente es que la revoltura intelectual que padece por el exceso de palabrería –probablemente, debido a la gran pobreza y limitaciones de lenguaje- es que suele confundir a su audiencia, independientemente de las groseras expresiones que usualmente emplea para mandar al carajo a quienes no coincidimos con su pensar.
Así, ha sostenido que “la gente ignorante es la que más apoya a Morena”; o cuando señala que “entre más analfabetismo” hay más votos a favor de su movimiento.
Sin duda, y aparte de lo anecdótico, es que la realidad ya lo rebasó y cada vez le cuesta más trabajo hilar coherentemente las respuestas a la dramática cotidianeidad que vivimos los mexicanos.
Cada vez, son más los mexicanos que dejan de creerse la cantaleta de los “otros datos” o las afirmaciones de que la economía va bien; cuando es suficiente escuchar las quejas de las amas de casa a quienes el dinero ya no alanza para comprar comida, en los mercados públicos donde, todavía, el crimen organizado no le cobra derecho de piso a los locatarios.
SEGURIDAD EN UN ESTADO FALLIDO
Una de las respuestas más desfavorables a la causa del macuspano, tiene dos vertientes: La primera es que, ya no le funciona seguir culpando al pasado, a las minorías rapaces o a los neoliberales, porque muchos ciudadanos podrían coincidir con el presidente en que, tal vez, le dejaron un país hecho añicos; pero… el dilema para el mandatario es que en los casi cuatro años de su gestión, los añicos siguen ahí y nada ha mejorado ni se ha resuelto, en especial, en materia de seguridad y tranquilidad de las familias.
Y cuando al presidente se le mencionan las cifras que cada vez son más preocupantes, la respuesta resulta insulsa: Nos reunimos todos los días a las seis de la mañana con el gabinete de seguridad. ¿Y qué si se reúnen tres veces al día? ¿Qué se ha resuelto? ¿Cuáles son las estrategias que suplan a lo que hoy no es posible llamar “estrategia”, porque “la estrategia es que no hay estrategia”? y lo que hasta ahora se ha realizado, es más que evidente que no funciona porque la criminalidad va al alza.
METODOLOGÍA DE UNA RESPUESTA INÚTIL PERO DIVERTIDA
López Obrador registra 121,655 homicidios, cifra superior a lo registrado con Felipe Calderón. ¿Qué hacen?… Nos vemos todos los días a las 6 de la mañana.
Cada mes se registran 2,896 homicidios dolosos. ¿Cómo se resuelve el tema? Nos vemos todos los días a las 6 de la mañana.
Ya se contabilizan 121,655 homicidios dolosos y feminicidios. Por favor, ¿qué están realizando para abatir estas cifras? Nos vemos todos los días a las 6 de la mañana.
Se van a rebasar las cifras de Peña Nieto: más de 150,000. López Obrador va por el Record Guinness: Este sexenio va a ser el más violento de la historia moderna de México. ¿Cómo van a impedir que los criminales se adueñen del país? Nos vemos todos los días a las 6 de la mañana.
Hay homicidios registrados que indican el aumento a 110,000 con AMLO, pero la Secretaría Seguridad Pública declara que “la estrategia sí funciona” ¡Recórcholis y recáspita! ¿En que se basan para asegurar que la dichosa estrategia sí funciona? El indicador es genial: Nos vemos todos los días a las 6 de la mañana.