Salvador I. Reding Vidaña.- Eso dice un viejo tango, “Volver” (a Buenos aires), “que veinte años no es nada”. Porque en esos recuerdos el tiempo vuela. Pero para mí, respecto a la Revista La Nación, veinte años… es mucho. Y es mucho porque son los años que han pasado desde que inicié mis colaboraciones en el órgano oficial de Acción Nacional. Y estos años me han dejado muchas satisfacciones, de hacer algo, con mi larga experiencia periodística, en beneficio de la defensa y reflexiones del humanismo político que es la doctrina del PAN. Con sus principios de origen cristiano, que aprendí desde niño y que he divulgado y defendido siempre.

Mi primera colaboración, en septiembre de 2000, bajo la dirección de Silvino Silva, fue sobre la persona de un buen amigo, excompañero de la ACJM, en donde los tres militamos: Carlos Castillo Peraza, recién fallecido en Alemania. Tras una buena temporada después de la ACJM, nos habíamos reencontrado en el PAN.

Y a través de estos veinte años, desde ese septiembre de 2000, he tratado diversos temas, básicamente de índole política, como corresponde, como también de otros relacionados con eventos importantes del mundo, y en particular sobre derechos humanos. He compartido propuestas, reflexiones, consejos, enseñanzas y análisis político.

Para mí, mis veinte años de La Nación, no pueden ser “nada”, sino al contrario, son mucho (pero mucho, mucho). Un orgullo colaborar en nuestra revista, y me gusta decirlo cuando se presenta la ocasión; es una parte importante de estos veinte años de mi vida. Y parte de ese orgullo, es la larga tradición de una revista en la que colaboraron y colaboran distinguidas personalidades, algunas de las cuales han dejado, por su propia vida privada, pública y política, una excelente aportación cultural tanto para la propia militancia panista como para la población en general. Un abrazo y una especial felicitación para mis compañeros de La Nación, al cumplir sus 79 años de vida.

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Salvador I. Reding V.
#81añosPAN