DEGRADANDO A LOS MEXICANOS POR LA POLÍTICA Por Salvador Reding
Hace tiempo escribí sobre lo que llamé un deporte nacional: la auto-denigración que muchos mexicanos practican, y hasta obsesivamente. Es una práctica inaceptable cuyo resultado es la frustración y generación de complejos de inseguridad (más que de inferioridad). Ante la avalancha de destrucciones institucionales, constitucionales