Ciudad de México.- El Presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados, Marko Cortés Mendoza, exigió al PRI-Gobierno dejar de usar las instituciones del Estado mexicano para denigrar y perseguir a los adversarios políticos, como ha quedado demostrado en el caso de los ataques a Ricardo Anaya Cortés.

“Hoy nuestro país lamentablemente es conocido en el mundo por la corrupción de La Casa Blanca, Odebrecht, La Estafa Maestra, los gobiernos corruptos de César y Javier Duarte, de Roberto Borge y Humberto Moreira; no en vano somos el último lugar en honestidad dentro de la comunidad de países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE, y todo por un grupo político rapaz que afortunadamente ya se va”, agregó.

El también Coordinador del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional aseguró que en este gobierno ha quedado en evidencia el uso político de la Procuraduría General de la República, del Centro de Investigación y Seguridad Nacional y de la Unidad de Inteligencia Financiera para tratar a toda costa de dañar a los adversarios políticos, construyendo una realidad que solamente es producto de la desesperación ante su próxima derrota.

“Es muy evidente que ante el éxito del PAN con Ricardo Anaya en el proyecto de precampaña, al ser el único que logró crecer en la intención de voto y ante la estrepitosa caída del PRI con José Antonio Meade a un tercero y lejano lugar, se provocó desesperación en Los Pinos, que ante la ausencia de luz de su candidato, buscan opacar el brillo del nuestro, buscan confundir a la sociedad y sembrar dudas en los ciudadanos haciendo uso del dicho de “difama que algo queda”. Afortunadamente el PRI y su gobierno ya están tan desacreditados que nadie les cree”, señaló.

Llama la atención, dijo, la celeridad con fines políticos con la que actúa la PGR en el caso de Ricardo Anaya, tratándose de una operación comercial entre particulares, que se dio ante Notario Público, que pagó impuestos, que cumplió con las leyes en la materia y que fue reportada en su declaración “3de3”, pero en cambio la PGR no ha hecho absolutamente nada para combatir la corrupción de este gobierno.

Hay claros ejemplos en donde la corrupción es tan evidente que, solamente pervirtiendo a las instituciones se pueden ocultar a los culpables; y ahí está el reciente caso de Rosario Robles Berlanga, a quien la Auditoría Superior de la Federación le ha descubierto un sistemático desvío de recursos en los cargos que ha ocupado, en la Secretaría de Desarrollo Social y la Secretaría de Desarrollo Territorial y Urbano, por 2 mil 130 millones de pesos.

“Por eso desde la Cámara de Diputados impulsamos un deslinde de responsabilidades y que la servidora pública se presente ante esta soberanía a explicar la ‘trama Rosario’ en donde supuestamente, con la ley en la mano, burlaron los mínimos requerimientos para el uso de los recursos públicos, pero que también sea llamado a declarar el candidato del PRI, José Antonio Meade, pues de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación, el saqueo en SEDESOL también ocurrió cuando él fue Secretario.

“Pero no solamente tenemos este deshonroso caso, sino también está el de Emilio Lozoya Austin con los sobornos de Odebrecht para la campaña de Peña Nieto en 2012; la dudosa compra de la empresa chatarra Agro Nitrogenados, sus vuelos personales en helicóptero y las compras infladas de vehículos de transporte en Pemex, en fin, toda una cadena de gastos dudosos, de los cuales, a pesar de las denuncias interpuestas en la PGR, solamente hemos encontrado oídos sordos y nula investigación del Ministerio Público Federal”, apuntó.

Para Marko Cortés, este gobierno pasará a la historia por haber protegido los grandes escándalos de corrupción donde los culpables no tienen el castigo que se merecen y todo porque la Secretaría de la Función Pública y la PGR no cumplen responsablemente con su función.

“Tan sólo hay que recordar la impunidad que mantiene el PRI-gobierno para los responsables del socavón de la México-Acapulco, los mega fraudes de OHL y Odebrechet”, resumió.

Aseguró que para el Presidente de la República no es importante que los funcionarios de su gobierno y su partido hayan contribuido al enojo social por sus malas conductas. “Por fortuna el país está harto de este gobierno y por eso los bajos niveles de aceptación popular para el PRI y su candidato Meade, porque la gente está urgida de un cambio, hacia la transparencia y la rendición de cuentas, que solamente se podrá dar con el PAN, que encabeza el primer Gobierno de Coalición”, finalizó.